Tratamientos presenciales

Estas visitas se realizan estando presentes el paciente y el terapeuta, lo cual permite un resultado mas eficaz en la mayoría de los casos. Hay tres tipos diferentes de visitas:

La primera visita, se realiza la anamnesis (preguntando al paciente por todos los pormenores de su dolencia), la exploración visual para detectar alteraciones estructurales que puedan influir o desencadenar el problema, la exploración manual, palpando los tejidos y articulaciones para encontrar los puntos dolorosos o inflamados,  la exploración funcional detectando las limitaciones de movimientos y funciones, y finalmente la valoración instrumental, tanto de las pruebas que aporte el paciente (resonancia, ecografías, RX, etc.) como las propias que podamos realizar en la visita.
En esta fase detectamos cuales son las «dianas terapéuticas», es decir los tejidos neuro-músculo-esqueléticos sobre los que debemos actuar, nos marcamos los objetivos y determinamos un pronóstico de tiempo para solucionarlo.
Acto seguido, realizamos el primer tratamiento y evaluamos la respuesta inmediata al mismo con una nueva evaluación final, y enseñamos ejercicios terapéuticos activos que completen y garanticen el resultado.

Visitas consecutivas de 1 h. son aquellas que por la importancia o complejidad del problema requieren de un tiempo largo de tratamiento. En ellas en los primeros minutos se valoran los resultados del tratamiento anterior, después se aplican las técnicas necesarias, modificadas o no según el resultado de la evaluación, y se vuelve a reevaluar el efecto de la misma sesión, que debe dar como resultado una mejoría inmediata.

Visitas consecutivas de 1/2 h. Son aquellas que requieren un tratamiento de una sola estructura y con menos tiempo se puede dar un resultado eficaz.